sábado, 25 de abril de 2009

Usted no lo haga - Usted, usuario del metro, opine.

Pasa que hoy iba en el metro, línea 1, despues de comprarme mis lindas zapatillas pokemonas 7 1/2. En la articulación iban dos "grupos": al parecer una familia en un lado, y al otro Pancho y yo, despues de la gran duda existencial sobre elegir cual de la multitud de modelos de zapatillas habidas y por haber. Algo pasa que fijo la vista sobre un niño: veo que se suena, pero sin confort, luego se mira la mano y le muestra su contenido a, al parecer, su mamá: todo lo que habia salido de su nariz luego de espirar fuertemente, puaj! Eso no es todo, algo le dice la señora al cabro chico, que este no haya nada mejor que hacer que esparcir sus mocos sobre la articulación negra de ciertos trenes de la red de metros. En eso digo "Oh, que cochino el cabro chico wn!", bien fuerte, con ganas que me escuchara el resto de la gente, pero ni tantas, asi que me mira un hombre de unos treinta y tantos, al parecer el padre del mocoso y la pareja de la señora, y me mira feo, igual que la mujer unos segundos despues. Pancho me dice "Oh, mejor no me dijas lo que viste", y asi me ahorré ver al pancho vomitando.


sábado, 18 de abril de 2009

Por amor o para el amor?

Esta semana ha sido rara: he escuchado como 30 ambulancias sonar cerca mio y hay cosas que a veces no entiendo.

Por amor o para el amor? O para qué? Esa es la pregunta. Esa es la duda, el cuestionamiento. Porque para gracia de unos o desgracia de otros, todo es amor, aunque suene cursi. Y aqui estamos, con amor, si amor, parados todos, seguimos caminando y hay algo que es clave: hay que saber reponerse a todo, hay que dejar que las cosas pasen, que el rio siga su cause y hay que seguir caminando. Hay que pensar con la cabeza fria y con el corazón tambien, frios ambos, sino las cosas no funcionan, porque creamos dos realiades distintas que no son compatibles, y vienen los problemas, el llanto, la pena. Hay que saber bajarse de la nube acorazonada y poner los pies en la tierra de vez en cuando, y lo más importante, no idealizar, no hacerce ilusiones tempranas a largo plazo, no predisponerse a morir de amor, tener los ojos puestos en el mañana y pensar que una mejor suerte llegará.